EL SPLEEN DE MADRID

LA QUE NUNCA DUERME ( DETALLE )
Acrílico sobre lienzo-2009




Hay días en los uno sólo está bien tras los cristales de una ventana mirando las calles nevadas. Y nos movemos entre el deseo de huir y la necesidad de la presencia, y tal buen combate es lo que genera el spleen de los buenos dandys, la morriña, la saudade, la melancolía del ángel caído, pero igualmente la teatralidad y el gusto por actuar para públicos invisibles.
Para los chinos la nostalgia o hudixiangbing indica llevar en el corazón el lugar en el que se ha nacido y al que de tanto en tanto se vuelve, xian, no sin dolor, bing. Yo he nacido muchas veces, en muchos sitios. Extranjero en tierra extraña.
¿ Es pues la nostalgia una suerte de mensaje interrumpido ? Si en su fase aguda tiene alguna solución solo puede ser el reencuentro consigo mismo. Todo antes que conjugar ese maldito verbo: Aburrimiento.
Porque el aburrimiento es hijo de la pereza y el egoísmo. Si lográramos en los momentos en que más nos estamos aburriendo, dejar de pensar en nosotros mismos, y empatizar con los demás quizá querríamos estar sin pretensiones ni exigencias a su lado, sin romper su silencio con nuestros reclamos ni perturbar sus meditaciones con nuestras quejas.
El sensei Arashi- san, de verbo calmado y espadazo certero, de genio vivo y pincel dulce, solía comentar a sus alumnos que la lentitud que conlleva el preparar los pinceles y los colores antes del trabajo nos enseña a estar atentos y a no descuidar nada, a ser pacientes y, sobre todo, a no aburrirnos en esos instantes en que nada aparente parece ocurrir.
En cierta ocasión en que iba a recibir visitas en su estudio se puso a limpiarlo. En el último instante cuando todo estaba inmaculado, cogió unos cuantos pliegos de papel de arroz que dejó caer blandamente sobre la mesa y el suelo de madera, hecho lo cual retornó divertido y sonriente a su habitación: " Esto es lo que se llama una auténtica limpieza" Dijo " La rutina se vuelve mágica cuando el trabajo no previsto realiza lo esperado "