UNA MIRADA AL MITO

Acrílico sobre lienzo-2009
Es hora de rescatar la sensibilidad del ridículo monopolio de curas, brahmanes y demás burócratas sin arte y sin misterio. Hay gente que se ha dado de baja de toda institución religiosa no por falta de sensibilidad religiosa, metafísica, sino por exceso de ella. La fe es el miedo. Solo en el asombro lo sagrado vive.
Lo sagrado, del latín sacer, es lo que está separado, lo que le da profundidad a la mirada y no permite que el mundo sea un espacio plano. Lo sagrado es lo real, lo totalmente " otro " a la vez fascinante y terrible. Para mí, que en veranos calurosos como este sólo creo en dormir, redescubro lo sagrado en los mitos.
Hoy los mitos padecen anemia severa. En Occidente ya ni los viejos mitos parecen tenerse en pie. ¿ Que fue del Grial, de Tristán, de Fausto, de Don Juan ? ¿ De qué hablan los novelistas ? Los medios se ocupan de estupideces sin cuento. Las nuevas mitologías arrancan de la publicidad y la moda. La televisión, olimpo de los mediocres, encumbra a cualquier mindundi y luego arroja sus huesos mondos a un albañal. El mito se despide de la tradición europea en el Ulises de Joyce, donde el héroe no hace otra cosa que caminar, conversar, pensar en mujeres y trasegar litros y litros de cerveza. He aquí el mito que nos gusta !!!! Además, ¿ Quien se ha leído entero el Ulises ?
Nos queda el anhelo que nos invita a movernos. Y la curiosidad que no nos deja envejecer. Quizá toda esta tierra baldía sea terreno propicio para plantar nuevas leyendas y abonarlas con experiencias plenas de vida. Quizá. Veremos...