GUARDANDO DISTANCIA

Tinta china sobre pápel
Si las puertas de la percepción
quedaran depuradas,
todo se habría de mostrar al hombre
tal cual es: Infinito
William Blake
En japonés MAAI es el momento antes de la unión final, es pues la distancia. ( Ma: Espacio de tiempo, lapso. Ai : Unir )
Como si de los polos de un imán se tratase, en la danza última, ambos antagonistas, el activo TORI y el pasivo UKE no conocen espacio que les separe ni tiempo que les subyugue. Están íntimamente unidos en lo que hacen, sienten y piensan, en lo que son, en el espíritu por un intervalo que no existe, MAAI.
MAAI puede ser infinitamente pequeño o inconmensurablemente grande.
Sin horas ni dias, sin sexos ni edades, todo está absolutamente inmóvil. No hay deseo pero a una señal invisible el pincel se mueve, la espada brota y la mano acaricia.
MAAI no separa, une. Esto lo saben bien los gatos y los niños, después de todo es la distancia la que manda. El ojo mide la distancia. Nuestros ojos clavados en los ojos que nos miran. Esto es MAAI. La mente mueve la energía interior, la energía interior mueve el cuerpo, pero es el ojo el que finalmente decide pues es el Ser siendo.